Presentación del disco de
CHICO HERRERA
LOS SERES IMAGINARIOS
Con la participación especial de las actrices y actores
por orden de aparición
ANA CARBAJO
DANIEL GONZALEZ
GABO URIARTE
ESPERANZA SERENO
CHARO DE FRUTOS
MARTA ZUÑIGA
WALTER CANEVARO
GUSTAVO NUÑEZ
CLAUDIA GAGO
ANA CAVALLIERI
LAURA SANTANA
Dramaturgia y Dirección LUCILA
MAQUIEIRA
Viernes 25 de noviembre, 20 h
Entrada libre y gratuita hasta completar aforo
Cd a la venta en el Centro de Arte Moderno
Chico Herrera hace diana ante un reto ambicioso. Mayor por tanto es su conquista. En este disco
poblado de seres imaginarios, él ensarta de un sólo gesto dos polos. Con un estilo musical maduro y luido,
hace converger la densidad que Borges
transita, con la luminosidad
que él y su música
irradian. En ese ejercicio de aproximar extremos, él
deja la última palabra
a la música. Sus temas
caminan con una deliciosa y aparente sensación de ligereza. Chico nos coloca ante un canvas de personajes llenos de simbolismo. Tendiendo puentes, mostrándonos el paisaje que se extiende
a ambos lados y ajándonos, en definitiva, la luna a las manos.
Una entrada
con arreglos de cuerda marca el arranque
de este viaje sonoro por el universo
mitológico de Borges,
por el amplio espectro
musical que pueblan las criaturas a las que Chico hace sonar en diversos registros. Pueblan sueños,
paraísos, asfaltos, castillos y bosques. Lugares húmedos preñados de vida en proyecto y en proceso.
La voz de Borges se espacia entre las cuerdas de la guitarra
mientras el sonido del cello
mece el aire y nos va llevando.
"Sin miedo y sólo, sin miedo a nada, decide avanzar" dice el tema A bao a qu, y ese leit motiv resuena
en todo el disco
como un mantra.
Más allá de los caminos trazados,
más, muchísimo más allá,
la Música, la buena música, escribe su historia en letras pequeñas;
el tamaño en el que, como
bien es sabido, se escribe
siempre lo importante,
lo insoslayable.Y este disco lo es.
MÚSICA con todas las letras, y por encima de todas
las etiquetas. No las precisa, las desborda.
Si el tema inaugural suena
a Jamaica, el marovany
(instrumento de Madagascar
con forma de maleta) de La casa de Asterión
nos transporta hasta África con el sonido que le sacan las manos del músico Kilema, haciéndonos
viajar por sacan las manos del músico Kilema, haciéndonos
viajar por paisajes meridionales más cálidos.
El trombón, la guitarra, la voz y el saxo,
sirven de vehículo en este viaje que crece y se expande con Youwarkee, isla Descubierta.”Te descubrí sin querer lavando tus alas, mitad pájaro,
mitad Ángel y entonces supe que contigo iba a casarme”. La voz de Chico
Herrera se transfigura en la de Leo Minax en Hechos de
tiempo, un tema que funciona
como el hallazgo de un
tesoro en una cueva; aún guarda más sorpresas: el incontestable recitado del cantautor y poeta Pablo Guerrero.
De ahí al tono más funky de Odradek
con el que atravesamos de nuevo
el Atlántico rumbo sur,
recuperando el verso
de Borges con el sonido
habanero de una trompeta maleconera
que trae brisa cubana y argentina en el golpeo
del contrabajo de Pedro Delgado.
El jaleo del sur llega con la percusión, los coros y el
saxo de Bahamut y Kuyata. Para adentrarnos por ritmos africanos en Hamadríada.
Los Demonios espolea las ganas de directo, nos
dice que estamos ante un disco que habría que disfrutar en vivo.
No queda lugar a las dudas
tampoco cuando escuchamos la voz de Chico, tan firme como sinuosa, discurriendo suavemente junto a la de Esmeralda
Grao. Sus voces se buscan,
se amoldan, se encuentran. Se dan. Se vierten
y se pierden, para interpretar El doble arropados por la guitarra
española de Pedro Pedrosa.
Maravilloso sonido
El devorador de las sombras, con
un chapoteo evocador
de esos seres
maravillosos que Borges imaginaba, y sobre los que Chico escribe ahora haciéndonos sentir el hallazgo.
Los dibujos
de Josemaría Mejorada
en la portada, dan forma a esos seres irreales, ponen el contrapunto pictórico a esta jungla
por la que deambulan seres que no
están al alcance
de los ojos. Hay que desbrozar
con
la mirada la abigarrada selva para encontrarlos. El trazo negro atrapa
de manera insidiosa la pupila.
Obliga a buscar: Nada está en la superficie,
todo la pupila. Obliga a buscar: Nada está en la superficie,
todo tiene más capas,
parece decirnos Borges. Todo
convive en la experiencia vital, todo confluye, creemos escuchar a Chico. Más puentes, más extremos
encontrados.
Todos se condensan en esta gema musical que busca
salir al mar para surcar latitudes y arribar a todas las orillas a las que debe su sabor y su brisa.Una suerte de tropicalismo cordobés (si es que algo así es posible
en la meseta) devolviendo siempre la ligereza al paso.
Entre los troncos del bosque ya vimos que hay seres
que nos están mirando.
Mejorada los
describe certeramente con su trazo.
Chico Herrera los
dibuja poniéndoles color con su voz y su guitarra. Y todo
suena en una armonía perfecta que enriquece la experiencia.
Borges suena como él y como otro: “Je est un autre”,
que decía Rimbaud o “Borges y yo” que dice el propio
Borges cuando concluye “No sé cuál de los dos escribe esta página...”
La de este disco la ha escrito Chico Herrera.
Nosotros, confiados, nos dejamos guiar
dentro de esa cueva ignota que nos propone con su música,
descubriéndonos un territorio virgen para la conquista.
Ávidos de seguir explorando, de pasar más tiempo
entre sus grutas como abnegados buscadores de oro, persiguiendo sonidos
con los que seguir soñando.
May Gañán periodista y artista
Chico Herrera
Va delgado,
empujando el aire de la calle. Nadie sabe a dónde va. Sonríe siempre que te
encuentra y se para a hablar contigo, como se paraba uno antes. Sin
prisa, con una sonrisa generosa y sincera. Te cuenta siempre mil cosas. Habla
de música, poemas y noches en las que dar la vuelta a todo.
Siempre fue
especial, siempre fue artista; desde niño, desde que lo recuerdo. Un músico
extraño, constante, perfeccionista, humilde y alegre. Aun recuerdo aquel
verano, rebuscando entre los manoseados libros de poesía de su hermano Rafa. A
su hermano Javi enseñándole a tocar la guitarra; aquel día en el que me dijo
que había compuesto una canción, y tímidamente la cantó; se llamaba “Arancha”.
Fue la primera de muchas que fueron llegando.
Después, su
fascinación por la música, por cantautores como Pedro Guerra, Javier Bergia,
Toquinho o Caetano Veloso, músicos que fueron poblando sus canciones de
ecos que entraban y salían, del viejo Madrid, de Brasil, de África, del
mundo. Otros músicos y amigos le han arropado siempre. Curro Rumbao,
Antonio Romero, Kilema, Moñiz , Javier Herrera, y tantos otros. Pero
especialmente Pedro Pedrosa. Su guitarra siempre estuvo a su lado, aportando la
magia del jazz y el flamenco.
El primer
disco llegó en noviembre de 2002, grabado en directo en la Sala El Quiñón, en
Córdoba. La misma sala donde al año siguiente presentaría un homenaje al
escritor argentino Jorge Luis Borges, llamado “Los seres imaginarios”. En 2004
giró junto a Héctor Urien con el espectáculo “Contantes y Sonantes” uniendo
canción, poesía y cuentos. Ese mismo año homenajeo al eterno poeta, a José
Ángel Valente, presentando los temas en el Teatro Cómico Principal de Córdoba.
Aún resuena en mí la canción del poema de Ángel González “porvenir”, de
aquellos días y que vino a quedarse para siempre.
Su amor por
la poesía, le ha llevado a participar en tres ocasiones en Cosmopoética,
el encuentro internacional de poesía más importante de los que se celebran en
España. En 2008, en este marco, presentó la adaptación de poemas de Pablo
García Baena en uno de los actos centrales del certamen. También surgió de ahí
su inmersión en la obra de Cavafis que le llevó a realizar una intensa gira por
Grecia en 2005, acompañado por excelentes músicos griegos. En 2008 participó en
la Noche Blanca del Flamenco y al año siguiente realizó una gira de 22
conciertos por Brasil y Argentina. En 2010, grabó en directo su segundo disco,
en colaboración con el músico de Madagascar afincado en Córdoba, Kilema,
grabado en el anfiteatro del Jardín Botánico de Córdoba.
Ahora
presenta el disco que siempre ha soñado, arropado por músicos enormes que le
inspiraron, que le llevaron de la mano hasta hoy. Su voz suena junto a las de
Bergia, Luis Pastor, Ruibal o Javier Álvarez. Como sonó siempre, en las
madrugadas despiertas del sur; ecos débiles en una canción que nace de un
acorde, como sin querer, como llegan los poemas. Como llega él.
Por: Pablo Rabasco