Miércoles 28 de mayo, 20 hM
Paloma González
Rubio y
David Torrejón
presentan sus
novelas
El
delito de la lluvia
y
Escríbeme
una foto
dos textos que se
entrelazan en un punto y que son a la vez
independientes
Los autores
hablarán con los asistentes de estas obras y de la literatura en nuestras
vidas.
Escríbeme una
foto, David Torrejón. Ed. de La
Discreta, Madrid, 2014
El delito de la
lluvia, Paloma González Rubio. Ed. de La
Discreta, Madrid, 2014
Participan
David Torrejón y
Paloma González Rubio
David
Torrejón: (Madrid, 1958) periodista, publicitario y escritor es autor
de Cinco Casos y un diálogo con
Artero (PPSA, 1987), de cuatro novelas más publicadas por Ediciones
de La Discreta Más lo siento
yo (2000) (finalista de los premios Sésamo y Diana), Mi querida Don Juan (2005)
Tango para un
copiloto herido (2010), y Escríbeme una foto
(2014).
Paloma González
Rubio (Madrid, 1962) es filóloga de formación y ha
desarrollado su trabajo como correctora, traductora y editora en importantes
editoriales. En 2007 ganó el certamen nacional de relato «José
Saramago». Ediciones de la Discreta publicó los relatos finalistas del certamen
y poco después Epitafio
(2010), su primera novela y ahora
El delito de la lluvia
(2014).
Escríbeme una
foto, David Torrejón. Ed. de La
Discreta, Madrid, 2014
Como
trabajo de fin de curso, Luis Almansa pide a sus alumnos del taller literario de
Albalajara que escriban un relato a partir de una vieja fotografía encontrada en
una almoneda. Los alumnos le retan a él a que escriba también su relato. El
profesor se cruza con un hilo que, aparentemente, es el de la verdadera historia
y decide seguirlo hasta encontrar un regalo envenenado. David Torrejón se
desdobla en cuatro personajes, tres alumnos y su profesor, y nos desgrana cuatro
historias tan diferentes como los personajes que son sus
autores.
El delito de la
lluvia, Paloma González Rubio. Ed. de La
Discreta, Madrid, 2014
El
hombre en el que se inspira el personaje principal de una saga policíaca y una
lectora de las novelas de las que él es protagonista se encuentran solos y
aislados cuando se avecina el fin del mundo, lejos de los suyos. Saben que no
hay salvación posible, y se dan la oportunidad de cumplir cada uno un deseo,
algo no contenido ni por la ley ni por la moral, que en ese momento han dejado
de tener validez. Su único lazo es la literatura. ¿Puede la literatura salvarnos
la vida?